miércoles, 26 de noviembre de 2008

LOS VECINOS DE CUBELLES QUIEREN ALEJAR LA TÉRMICA DE SUS CASAS


El Ayuntamiento de Cubelles ha mantenido un primer contacto con responsables de Fecsa Endesa, propietaria de la central térmica del municipio, para intentar un traslado de la planta y sacarla de una zona frente al mar y en la que ha quedado rodeada de viviendas y bloques de pisos.

El planteamiento que se ha hecho a la empresa es llevar la central a terrenos que ya son de su propiedad en una zona interior y donde la compañía tiene unos depósitos de gasóleo para alimentar a la central y un centro transformador. Los terrenos quedan al lado de donde la Generalitat construirá la desalinizadora de Cunit.

Según explicó el concejal de Urbanismo de Cubelles, Miguel Ángel López, la empresa ha escuchado la propuesta «y no se han opuesto de entrada». Sin embargo López reconoce que es un proyecto difícil ya que supondría un coste de unos 80 millones de euros, según cálculos que habría hecho la propia compañía.

La central térmica del Foix está justo en el límite de Cunit y de hecho es la localidad del Baix Penedès quien más sufre los efectos de las emisiones de la central. Cuando se hace un cambio de filtros o se quema gasóleo para la producción de electricidad, las emisiones causan el óxido de barandillas de balcones, coches y ensucian la ropa.

Los vecinos de Cubelles y Cunit constituyeron una plataforma para desmantelar la térmica, ya que la planta ha llegado al límite de edad de estas instalaciones, y esperaban que la localidad del Garraf perdiese la catalogación que desde 1972 la señala como zona energética. Sin embargo la Generalitat mantuvo esa catalogación.

Fecsa Endesa ha mostrado además su interés por mantener la central, que define como estratégica, aunque ya anunció que derribaría la actual instalación para construir en la misma zona dos plantas de ciclo combinado, que son de menor tamaño y tienen menos impacto en sus emisiones.
Ese desmantelamiento de la actual central es el que pretende aprovechar Cubelles para lograr el traslado de las nuevas plantas a una zona alejada de núcleos urbanos. Los terrenos están por encima de la autopista C-32 en terreno montañoso ya que son propiedad de la empresa. El principal problema es la necesidad de la proximidad del mar para las tomas de agua que sirven a los procesos de refrigeración de la central.

Desde el Ayuntamiento de Cunit el concejal Xavier Lorenzo señala que «sería una gran noticia para Cunit ya que somos los grandes afectados por la térmica».

Hace unos años el municipio aprobó una moción en el pleno en la que se pedía el desmantelamiento de la planta y en el caso de que no fuese posible que los dos municipios tuviesen compensaciones.

La térmica está ahora en el centro de una nueva zona residencial con grandes jardines e incluso la Generalitat contempla hacer un puerto aprovechando los diques de lo que se conoce como el puerto de la térmica pero que en realidad es la zona de toma de agua para la central.

Los terrenos de la actual central térmica son propiedad de Fecsa Endesa están catalogados como de servicios y así se mantendrían según las intenciones del Ayuntamiento del Garraf.

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